Estilos de vida

Ejercicios en el agua en la tercera edad

Fuente: Ejercicios en el agua para mayores

Hace no mucho tiempo realizar ejercicio dentro del agua era una práctica muy extraña. No había vida acuática más allá de la natación. Por suerte, con el paso de los años, esto se ha convertido en habitual o ¿acaso no has visto nunca a un grupo de personas realizando ejercicios en una piscina?

Son numerosos los estudios que han reflejado la importancia de trabajar en el agua así como los múltiples beneficios para la salud. De hecho, uno de los sectores más aficionados a esta práctica son los más mayores. Conozco a varias personas que tras jubilarse se aficionaron a esta práctica y han visto cómo mejoraba su agilidad. Además, no solo les permite mejorar su salud sino que, además, pueden conocer a otras personas con las mismas aficiones.

Ventajas y beneficios del ejercicio acuático

Practicar gimnasia en el agua tiene innumerables beneficios para la salud. No está limitada a una determinada edad, al contrario, puedes beneficiarte del agua tanto si eres una madre en estado de gestación, como si quieres recuperarte de una lesión o si perteneces a la tercera edad.

El ejercicio acuático te proporciona mejoras sobre la flexibilidad y tonificación del cuerpo. Por otro lado, ayuda a ganar equilibrio y resistencia, pues no es lo mismo la práctica de los ejercicios sobre una estructura estable que teniendo que “luchar” contra el agua. Aumenta la capacidad aeróbica y te otorga beneficios sobre la circulación sanguínea, bienestar mental y un largo etcétera.

Ejercicios acuáticos para todos

Si estas interesado en esta clase de actividades acuáticas, te propongo una lista de ejercicios sencillos que puedes realizar tengas la edad que tengas.

1. Caminar por el agua: básico pero eficiente, se trata de andar contra la resistencia del agua de diferentes maneras. A pasos cortos, largos, intentando impulsar la pierna lo más adelante posible, andar de puntillas estirando lo máximo posible el cuerpo, andar con los talones, caminar con la parte interior y exterior del pie, etc. ¡Dale a la imaginación!

2. Movilizaciones: apoyado sobre el borde de la piscina, realiza movimientos circulares con tobillos y rodillas. Puedes también agarrarte la pierna a la altura de la rodilla y lanzarla hacia delante.

3. Elevaciones laterales y frontales de piernas: este lo puedes realizar por parejas o de forma individual. Por parejas es más sencillo pues facilita el equilibrio. Lanza la pierna hacia adelante o hacia el lateral. Una vez hecho con una, realiza lo mismo con la otra.

4. Bicicleta imaginaria: con los antebrazos apoyados en el borde de la piscina, haz como si pedalearas con las piernas en una bici imaginaria. Para ello, debes situarte mirando hacia el interior de la piscina.

5. Patada trasera: apoyado con los antebrazos en el borde de la piscina pero mirando hacia el exterior de la piscina, golpea el agua hacia atrás.

Esto son algunos ejercicios que tengas la edad que tengas puedes realizar con muchísimas garantías de mejora física y psicológica. ¿A qué esperas para animarte?

 

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

diez + 10 =